¡Calambres! ¡Calambres!
¡Calambres en todo mi cuerpo!
He tocado un cable
de alta tensión,
me deja pelada.
Un cambio en mi vida,
estoy que ardo.
¡Calambres! ¡Calambres!
¡Calambres en todo mi cuerpo!
Un gran quemazón
recorre mis venas,
¡estallan calambres!
¡calambres!
¡calambres en todo mi cuerpo!
Mi protección
no me ha servido de nada.
Y pongo, la cabeza,
sobre mi almohada,
no cojo el sueño.
Una dura batalla,
traspapela mi vida,
en una amargura dolorosa.
¡Quién pudiera borrar
algunos fatídicos días
de mi calendario!
¡Se me cierran
mis conductos!
Sin respiración,
mi cerebro alicaído,
pájaro perdido de su nido,
ante una impostora,
con su daño, sin cautela.
Quizás,
presente mi dimisión
ante mi reguera de dolor
que, comenzó,
un triste uno de febrero.
¡Maltrecho día!
¡Fuera de mi calendario!
¡Quiero borrarte!
Que alguien me enseñe
cómo hacerlo,
sin dejar este universo,
por favor.
¡Calambres! ¡Calambres!
¡Calambres en todo mi cuerpo!
Detrás de cualquier tema físico siempre está un dolor emocional, si dedicamos atención para investigar el malestar, encontraremos la solución a nuestro mal.
Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
[…] https://poemasdemercedes.com/2019/03/31/reguera-de-dolor-numero-339/ […]
Me gustaMe gusta