¡Oh deterioro!
¡Físico! ¡¡Mental! ¡Intelectual!
A oscuras, por la puerta trasera,
primura, de años de espera,
tu mella, en el cuerpo,
tu telele, en los huesos
tu descarada tintura,
moviéndonos, como a un muñeco;
roto muñeco,
sin peluca, sin zapatos,
sin sonrisa de niños,
sin soldadura,
en los soldaditos de metal,
desaparecieron, en aquel portal,
perdidos, en el suelo,
se los llevo, el perro,
en sus dientes,
sin saber dónde ni cuándo.
Así, mejor,
ni pensarlo.
🥰🥰🥰
muy dramatica, me gustan mas tus poesias de alegria y amor
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esta va dedicada para una señora que me decía siempre que la vejez es muy fea😘
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