Llamadas
¡de amigos! ¡de familiares!
¡de conocidos!
¡con ánimo! ¡con valentía!
¡con fuerza para mi momento!
¡para el cambio de mi vida!
¡Ánimos de todas clases!
¡Anímate!
¡Todo irá bien!
¡Reza! ¡Medita!
¡No te dolerá!
¡Ten fe!
¡Aquí me tienes! ¡A tu vera!
¡Pide! ¡Te acompañaré!
¡Mi mano extendida para ti!
Mientras,
miro a mi alrededor,
todo tan extraño,
un nuevo barco,
doloroso barco,
en una tempestad,
donde, sobrevivir,
¡fundamental!
Y, el dolor, ¡me llegará!
¡no hay escapatoria!
¡ni por una puerta falsa!
¡ni por una puerta de atrás!
¡Llega mi lucha!
¡fundamental!
Agarraré,
el timón de mi vida,
¡fuerte!
¡con un golpe de esperanza!
Al mirar a mi alrededor,
¡no estoy sola!
mas sé,
que el dolor físico,
¡mío! ¡tan solo mío!
¡nadie me lo quitará!
Y que, las raíces de mi mal,
¡aquí están!
¡no tengo claro si sanarán!
Fuerza y valor,
¡no me faltarán!
Puede ser,
mi sentencia de muerte,
quizás,
mas, yo,
¡no me rendiré!
yo,
¡lucharé!
1 comentario en “Ánimos (Número 264)”