Y, mi alma,
sale de mi cuerpo
por mi entrecejo.
Ha encontrado un hueco,
me abandona,
se va contigo.
Al salir, aletea,
tu alma, a voces,
suplicando, la llama.
Amor mío,
tú, presientes,
a mi alma, contigo.
La unión de nuestras almas,
¡una vez más!
Nos amamos
en nuestro campo secreto,
allá en las lagunas,
cerca del riachuelo.
Bebemos agua de colores,
tú, prefieres el verde
esperanza, mi amor.
En mi alma,
miles de burbujas,
grandiosas, bellas,
amado mío.
En tu alma, sopla
un aire puro, liviano,
te alza, junto a mí,
por los cielos encantados.
Volamos de nuevo
hasta Sirio.
Y, así, vive,
nuestro amor verdadero,
¡eternamente!
Fotografía Pexels
Pingback: Sirio (Número 133) – 🌎 Alquimia. Bellos poemas. Mercedes Merluna.