Besos venecianos (Número 55)


Y, Dios,
cada mañana,
me manda señales
de tu amor,
justo cuando,
sobre mí,
se posan los pájaros
más bellos del universo,
Y, con su estoico canto,
ellos,
me llevan a tu nivel,
tan elevado para mi ser.
Y, con esa música,
duerme mi corazón,
con dulces nanas,
con besos armoniosos
que me acechan cada día;
venecianos besos,
mi amor.
Y caigo postrada ante ti,
mi amor,
para, por fin,
amarte.

Una respuesta a “Besos venecianos (Número 55)”

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.