El génesis de nuestro amor,
prendado,
de una estela plateada,
a lomos, de un blanco unicornio.
Estantes de los amores
del especialista mambo
donde, la luz, se abre paso,
contra los maremotos
y los cánticos,
sin la histeria,
de una brava naturaleza,
pendiente,
de celebraciones a lo grande,
cualificando,
el golpe mayor
de la buena aventura,
colonial de los esparpajos
de tu corazón.
Sembraste las más bellas flores
del paraíso danzarín,
con tus cromos,
en esas manos de oro
y, con las pinceladas,
de todos tus mayores tesoros,
entre naranjos,
clamores y oros.
Alguien predijo
el génesis de nuestro amor;
sin dudas, acertó.
«Principium»
(Principio).

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