Hicimos, de ese fango
espantoso,
del que, tú, me liberaste,
una cama de luna,
en esa noche,
de una turbia, reliquia,
entre los abrazos
de tu bienaventurada cripta,
de papel blanco
donde, yo, te pinté
la góndola
que nos paseó por Venecia.
Hicimos, de ese fango
espantoso,
del que, tú, me liberaste,
un banco de sol,
rodeado, de Ángeles
y, sus mejores canciones,
con su arpa de cerezo,
con sus veintiséis cuerdas,
entraron por nuestros oídos,
viven, en nuestras cabezas.
Y, tu garganta,
dio un grito al vacío,
tu alma, hasta lloraba,
mi amor.
Te pusiste junto a mí,
nos miramos,
con un silencio profundo.
Nuestros átomos,
lanzaderas de amor,
sin mediar palabra,
solo el crujir atómico,
caímos, el uno, en el otro,
hicimos el amor,
ahora, tengo tu calor,
llama viva de mi alma,
del color rojo pasión…
Hicimos el amor,
entre los rayos del sol,
mi amor.
Tú me bajaste la luna
y, ahora,
voy por el mundo
con el oro del sol,
con la plata de la luna
y, con mi mayor tesoro,
que eres tú, sin dudas.
🥰🥰🥰
https://www.safecreative.org/work/1911082430939-tesoro-numero-596
Alquimia poemas andaluces. Mercedes Luque Navarro. 
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