Sonámbula por tu amor
en el mejor de los escenarios,
con una puesta de sol,
a caballo tú y yo,
con el soliloquio,
de un verano fausto,
especial,
con la estructura carnicera
que te has encontrado
en mis manos,
al amarte, desesperada,
entre estos acantilados,
tumbados,
en este paraíso de calma
entre tu alma y la mía
que se han reconocido
por solo las miradas equis
de corazón a corazón.
Y, en un extremo de las rocas,
se posan,
observadoras,
de este maravilloso idilio de amor,
para serpentear,
entre las inventadas flores de nardos
y, fantasear,
con los imaginarios lirios,
después de hacer el amor,
para, juntos, subirnos al sol.
¡Amantes en toda esta colorida estructura de fardos entretejidos
con las arañas de nuestra pasión!
¡Patria del amor habido y por haber entre nosotros dos!
Posdata:
¿Imaginación o realidad?
Tú verás…
