La realidad de una herencia,
grandes trifulcas entre los hermanos,
los más avaros, extienden sus manos,
sin piedad y sin ninguna clemencia.
Atacan sin nada de indulgencia,
su actitud, cual malvados paganos,
su moral de salvajes villanos,
sus ruines acciones, en evidencia.
El cofre de Alí Babá desvalijan,
otros, roban al difunto en caliente,
antes que aparezca el siguiente.
Observadores por una rendija,
no dan crédito a esos actos,
los dignos, respetan estupefactos.

Replica a Darnell Cureton Cancelar la respuesta