Caliente, caliente,
entre los infiernos del mundo,
un cruel artilugio,
llena de imaginaciones
este triste cuerpo,
sin condiciones,
para alzar el vuelo,
delante de este maldito precipicio
que me ha paralizado,
durante la realidad de mi tiempo;
meses, años, lustros…
inmóvil, sin echar un paso adelante,
mirando a la nada,
al vacío con, mis intentos,
de reconstruir un mundo nuevo
que me llene de sueños,
de estrellas celestes,
de lindas aventuras secretas,
de puentes, sacados,
de un cuento de hadas,
para alimentar mi alma.
Aquí parada, en este lugar,
creo, que me han salido,
dos alas mágicas, sagradas.
El colorido de mis lindas alas
me reporta de felicidad,
idílico momento delante de mí.
Me precipito por este precipicio
y ¡vuelo! ¡vuelo!
¡el comienzo de mi mundo nuevo!
0 comments on “Precipicio (Número 746)”