Hija, no te calles (Número 629) Míriam Fotos Wabisabi


Ata tus zapatos,

(si los tienes),

la vida, de ahí afuera,

te necesita, fuerte.

Empodérate,

con tus mejores cualidades.

¡Mucha atención!

la observación, en tu alrededor.

Abre tus ojos,

te rodean, trampas,

que cazan, a todo tipo de presas,

¡atenta! ¡no seas una de ellas!

(pueden ponerte, una zancadilla,

delante de tus narices).

Tú, no te apresures,

la meditación,

en todo cuanto te hagan.

Mas…

¡no te calles! ¡nunca!

tu boca, abierta,

tus gritos, al viento,

la verdad, por delante.

No agaches tu cabeza,

te darán más fuerte.

Recuerda…vas bien calzada

y, si no, sueña que vuelas,

¡sé fuerte como tu adversario!

¡no dejes que te hagan daño!

Hija mía, el daño mata

y, a mí, casi me han matado:

¡tiros a bocajarro!

¡tiros por la espalda!

¡tiros en el suelo!

¡lo siento! ¡lo siento!

hija mía,

yo, casi que he muerto…

🥰🥰🥰
https://www.safecreative.org/work/1912042619913-hija-no-te-calles-numero-629-

https://instagram.com/brightworld22?igshid=1jptbvj5wfk47

7 respuestas a “Hija, no te calles (Número 629) Míriam Fotos Wabisabi”

  1. A menudo, vivimos con prisa, olvidando el regalo precioso que es cada amanecer, ignorando que cada crepúsculo nos acerca un poco más al ocaso. Así que mejor vivamos la vida con intensidad.
    Me gustó mucho tu poema Mercedes.

    Me gusta

Replica a macalder02 Cancelar la respuesta

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.