En mi materia cuelas tu
arsenal,
con tu oro y tu plata,
compañero,
amarillo y blanco, gran
lucero,
mimo de mi alma
incondicional.
Temblorosa con tu cuerpo
astral,
el polo magnético de tu
acero,
rastro en mi desvelo
ahogadero.
Subo a otro plano
existencial.
Qué maravilloso este
ascenso,
hondura de un estado
apacible,
regalo de tu amarre
intenso.
Beneficios con tu aire
invisible,
creador de un momento
extenso,
con éxtasis de amor,
irrepetible.
Deja un comentario