Sabes que nos entendemos,
sabes perfectamente lo que pienso,
así de sencillo, nuestro camino,
¡lo sabes! ¡lo sé!
tú y yo ¡lo sabemos!
¡no hay distancias!
¡no hay tiempo!
¡no hay circunstancias!
Nuestras adorables almas,
se perciben, se cuidan,
se llaman desde sus inicios,
desde sus primeros destellos,
allá, en el firmamento.
Y, el brillo de tu alma,
me llega desde donde tú estés
y, la mía, brilla para ti,
de manera angelical,
donde tú estés te cuidará,
¡lo sabes! ¡lo sé!
tú y yo ¡lo sabemos!
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