Desde niña,
en mi recuerdo
esas medidas de la Virgen,
blancas celestes,
esas medallas de plata,
esos pañuelos blancos,
esos moñitos,
cogidos con alfileres,
en la ropa de la gente.
Desde niña,
en mi recuerdo,
una noche de cohetes,
alegría en la madrugada,
por ese camino,
con vecinos, con amigos,
con familiares…
Y, con unos brindis,
cantando, bailando,
tocando palmas…
comiendo perrunas…
Desde niña,
en mi recuerdo,
las paradas del camino,
alternando los peregrinos,
hasta llegar al poblado,
¡Setefilla! ¡qué descanso!
Desde niña,
en mi recuerdo,
un recitar de alabanzas,
una tostada en las brasas,
los puentes, los arroyos,
las flores, los pastos,
la tierra calma,
los árboles,
el tomillo, el romero…
Desde niña,
en mi recuerdo,
las escaleretas,
¡ay! ¡qué ahogo!
Estas cuestas supinas,
¡cuánto cuesta subirlas!
Desde niña,
en mi recuerdo,
¡VAYA CARA TAN BONITA!
¡EL ORGULLO DE LA SIERRA!
¡LA PATRONA DE ESTA VILLA!
¡LA VIRGEN DE SETEFILLA!
¡MADRE SEÑORA!
Desde niña,
en mi recuerdo,
al alba,
los loreños llegando,
algunos,
han pasado la noche,
cerca de la Patrona
en el mismísimo cielo,
¡qué revuelo!
Desde niña,
en mi recuerdo,
las campanas.
Y, a las once de la mañana,
sacudidas en mi alma.
¡La serranita hermosa,
preparada!
Sonrisas para sus fieles,
y, con su niño en los brazos,
sale para sus hermanos.
¡VIVA LA VIRGEN DE SETEFILLA!
¡Viva el OCHO DE SEPTIEMBRE!
de cualquier año…
en Lora del Río,
en mi pueblo!
(día en que yo nací,
será pura casualidad).
https://www.safecreative.org/work/1907261539180-romeria-de-lora-del-rio

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