Insomnio (Número 391)


¡Insomnio! ¡Insomnio!

adiós a mis buenas noches,

las de una cachorrilla,

¡bocarriba! ¡bocabajo! ¡de lado!

¡con la salud de un retoño!

¡con mis brazos abiertos!

¡estirada al máximo!

Me pasaba, las noches,

en mis sueños del dorado,

en un esplendoroso descanso.

Y, ahora,

¡insomnio! ¡insomnio!

incapaz, de un descanso.

¡Para un lado! ¡Para el otro!

¡Bocarriba! ¡Bocabajo! ¡De lado!

¡Un zumo! ¡Una leche caliente!

¡Una tila! ¡Una manzanilla!

¡Para nada!

Mis noches,

con la luz triste,

de una linterna pequeña.

Mi idea, no molestar,

a quienes, siguen,

siendo cachorros.

Yo, al contrario,

¡insomnio! ¡insomnio!

Se fueron, mis sueños,

por el desagüe.

Y, esta borrechera,

me pasa factura:

¡ojeras oscuras!

¡piel pálida!

¡mala cara!

¡insomnio! ¡insomnio!

como si, de feria en feria,

mi vida pasara,

sin ver, en las noches,

¡ni un rebujito!

¡ni un amigo!

¡ni un cacharrito!

ni siquiera, una portada de feria,

a no ser,

que me la invente.

¡Insomnio! ¡Insomnio!

¡Qué difícil dormir!

Me quedo, con mis caballos,

¡al galope!

¡bajo la luna!

¡bajo las estrellas!

¡insomnio! ¡insomnio!

😔😔😴

6 respuestas a “Insomnio (Número 391)”

  1. Es muy duro el dichoso insomnio, yo lo parezco desde pequeña, me ha pasado buena factura a lo largo de mi vida, estar tantas noches de vigilia seguidas.
    Un abrazo Mercedes⚘
    https://poetasenlanoche.wordpress.com/

    Le gusta a 1 persona

    1. Pues el mío es muy reciente y vaya si se hace la noche larga.
      Un abrazo Yvonne!!!

      Me gusta

  2. Insomnio que inspira a más de un poeta sin lugar a dudas.

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.