Mi caminar, despacio,
sin prisa, fuera el estrés,
vi un perezoso ayer,
quiero ser como él:
la felicidad, en su cara,
simpática sonrisa,
horas y horas,
en las copas de los árboles,
por las selvas húmedas
del Norte de Sudamérica,
con su espalda hacia abajo,
en esas ramas posado.
También vi uno nadando,
¡qué buen atleta en el agua!
¿quien lo diría?
Más tarde,
un hombre buscaba uno,
(lo quería como mascota).
¡Ten cuidado perezoso!
continúa en tu hábitat.
¡Ten cuidado perezoso!
los cables eléctricos,
pueden electrocutarte.
¡Ten cuidado perezoso!
no cruces las carreteras,
de los coches, buena presa.
¡Ten cuidado perezoso!
que lo sepas:
¡no eres mascota de nadie!
El hombre, tu depredador,
¿cómo no?
¡protégete, por favor!
¡Ten cuidado perezoso!
tú, animal en extinción.
un grito por tu protección,
tercer domingo de octubre,
¡tu Día Internacional!
Perezoso…
tú, uno de los animales,
más lentos de la tierra.
Perezoso…
llevas el frío en tu cuerpo
por tu poco movimiento,
¡qué poca musculatura!
¡qué poco calor! un hielo.
Perezoso…
(en tu Día Internacional)
por ti, alzo mi voz;
¡sobrevive, por favor!
¡gritos por tu salvación!
https://www.safecreative.org/work/1910222296893-perezoso-numero-579-
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