Sin igual (Número 237)
en la llamativa
estratosfera,
culmen,
del interior oculto
de mi vereda.
Silbidos al oeste de mi mar,
con la necesidad,
de oír tu cántico,
con el expectante,
cuadro inmóvil
de tu calavera mutante,
que arde, despiadada,
hacia el termal bálsamo
de mi piel
y, tambalea,
cuando te veo a mi vera.
«Intrepidus momentum«
Momento sin igual.
3 respuestas a “Sin igual (Número 237)”
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Remigio muchas gracias a ti por leerlo y por tu comentario.
Un gran abrazo amigo!!!!!😘😘Me gustaMe gusta
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